En Facebook, una conversación sobre aborto toma los rumbos que cabe imaginar a lo largo de más de 400 comentarios, y no se deja un tópico sin tocar. Lo normal.
Entonces interviene mi amigo Jesús Landart, que es un tipo brillante y plantea esto:
Aquí es evidentísimo que todo el debate puede resumirse en contestar a una pregunta muy escueta: ¿Es una persona un feto? Responder a esta pregunta lo es todo. Personalmente me pasma la facilidad con la que mucha gente encuentra la respuesta. A mi me cuesta muchísimo. Llevo media vida pensando en ello, y aún no he encontrado la respuesta. Debe ser que copié en el test de CI. Lo más cercano a una respuesta que me satisfaga es la existencia de actividad cerebral. Si no la hay, yo veo claro que «no hay nadie ahí». ¿Pero si la hay?
Este debate sobre la actividad cerebral viene a cuento, entre otras cosas, de los plazos que la ley prevé para permitir abortar y demás. Sin embargo, la actividad cerebral o la capacidad de sentir no te convierten en persona. Mira a la ministra de Trabajo. Yo discrepo con Jesús, por mal que me sepa, porque la pregunta clave no es esa. Creo que es la siguiente.
La pregunta es, ¿por qué una mujer no tiene derecho a decidir acerca de algo que pasa en su propio cuerpo? Así de claro.
Si a Jesús le dijeran: «Jesús, vamos a implantar en tu organismo otro organismo que crecerá en él, y será un proceso doloroso, agotador, y además durante la intervención para extraerlo correrás un riesgo considerable», nadie, empezando por gente que se considera antiabortista, considerará que no tienes derecho a negarse. Es su cuerpo, joder, ¿cómo no va a tener derecho a decidir qué pasa con él y en él?
Pero una mujer se queda embarazada de repente ya no tiene derechos sobre su propio cuerpo. Y la diferencia es que en el caso que le planteo a Jesús, él es un señor con toda la barba. Y se trata nada más que de eso.
A lo que Jesús, lúcidamente, contesta:
De hecho, yo estoy de acuerdo en todo lo que decís y veo meridianamente claro el derecho de las mujeres sin ninguna duda. La cuestión es poder afirmar que no hay más derechos ahí dentro, incluso en un nasciturus, como dicen los letrados, casi a término.
Pero antes de que yo pudiera contestar, le contestó Esther con el argumento que habría hecho yo, y que ella formula muy bien por lo que la cito a ella:
Pero es como el caso del tipo que necesita el hígado, pero peor, porque el necesitado de trasplante SÍ es una persona con todos sus derechos. Y aún así, nadie se cuestiona que tenga ninguno para exigirle a nadie que le dé medio hígado. Y lo mismo pretenden que pueda exigírselo un feto a su madre.
Exacto. Nadie puede obligarte a donar un órgano, por más que la otra persona lo necesite, porque se entiende que tu derecho a decidir qué pasa con tu cuerpo precede al derecho de cualquier otra persona, incluso si es el derecho a la vida. Si yo decido que no quiero donar médula, tengo ese derecho aunque el otro se muera. Y no se discute.
Que sí, que como hay bebés implicados lo perdemos todo de vista porque los bebés son algo brillante, maravilloso y lo más normal es querer protegerles a toda costa. Yo soy padre y lo sé. Mirad:

La cuestión aquí es que, si el derecho a decidir sobre tu cuerpo es sagrado e incuestionable para un tío, también debe serlo para una mujer. Y recordemos también que defender el derecho de las mujeres a decidir sobre si quieren seguir un embarazo o no implica obligar a nadie a abortar, ni implica que quien quiera seguir adelante con un embarazo no deba tener todas las garantías de que va a poder hacerlo. Eso es retórica antiabortista de tarados.
Qué bien me ha sentado esto, hacía tiempo ya.
Me gusta.
El único posible «pero» que le pondría al argumento de Esther es que, según la ley, los padres tienen una serie de deberes con su hijo, el primero el de proteger su vida. Entonces puede haber conflicto entre el derecho al hijo a ser protegido y el derecho de la madre a decidir sobre su cuerpo. Ambos, en cuanto a derechos fundamentales, me parecen del mismo peso.
Hay quien blande como elemento desestabilizador de este equilibrio la manifiesta indefensión del no-nato contrapuesto al libre albedrío de la madre, pero esto es falaz porque la madre no siempre disfruta ese libre albedrío. Que se lo pregunten a las mujeres de Dubai o a una víctima de una violación en Irlanda. O aquí a cualquier mujer si finalmente el PP saca lo que quiere sacar.
Entonces, y ante la imposibilidad de romper ese equilibrio de derechos, en España se adoptó la solución de poner una frontera médica, traspasada la cual el feto deja de serlo y se convierte en alguien con derecho a la vida. Pasado ese umbral se adopta la tesis de que, salvo casos en los que la medicina diga lo contrario, el perjuicio de la madre pesa menos que la muerte del bebé.
No me parece una mala regulación. Es, desde luego, mucho mejor que la anterior que criminalizaba el aborto y luego ponía excepciones. El aborto puede y debe seguir siendo un derecho y como tal debe estar regulado por las leyes.
La frontera médica, sea la actividad cerebral como postula Jesús, o los primeros latidos del corazón como defiende otra gente, es fría, pero objetiva. Yo concuerdo con Jesús al adoptar eso como elemento de juicio vital.
Ear, los doctores tienen un deber con sus pacientes de salvarles la vida y atenuar su sufrimiento. Nadie le exige a un doctor que done un órgano sólo porque es compatible,
Nunca, nunca, puede pesar más el derecho a la vida de otro que el de decidir qué hacer con tu cuerpo. ¿Si el bebé es anencefálico también? ¿Y si viene de una violación? Recordemos, la gente no aborta por gusto: aborta la mayoría de veces por razones así.
No, si desde el punto de vista lógico no es posible decirte ni mu. La única manera en que se sostiene el punto de vista antiabortista, especialmente el más vitriólico, es desde un punto de vista teleológico: «la mujer tiene vagina para quedar embarazada y dar a luz hijos» pasa a «la mujer nace para quedar embarazada y tener hijos», y por último llega a «la mujer debe quedar embarazada para tener hijos». Y en cada nuevo matiz, hay más y más obligaciones hacia la mujer.
Con los embarazos no deseados ocurre como con el SIDA en su momento: se consideraba un castigo -bien merecido- a los libertinos. Justicia divina. Habrá muchos proabortistas que hayan retorcido su propia retórica hasta el punto de creer que les da igual y que lo enfocan fríamente como una simple cuestión de derechos, pero no lo han pensado bien.
¿Y las violaciones, qué?
Lo de prohibir el embarazo en caso de violación imagino que responde a la creencia de que el pueblo somos escoria mentirosa o a aquello de que la mujer se lo busca. Y lo de prohibirlo en caso de malformaciones ya si que no sé.
Por cierto, donde dije proabortistas tenía que poner antiabortistas. Los conceptos antagónicos suelen bailar en mi cabeza intentando ser el elegido, y como me pille un poco dormida, la liamos. Con los refranes soy una fiesta también.
¡Joder, Marta! Con razón decía que el mensaje era raro y hasta se lo enseñé a un colega, porque si bien olía la ironía, al leer a continuación «proabortistas» casi pensé que era un caso de libro de la ley de Poe acerca de los fanatismos y sus parodias.
Pero bueno, me has quitado un peso de encima.
Modestamente digo: la analogía no me vale. La extracción de medio hígado para donarlo es antinatural y dañina para el donante. El embarazo es un proceso natural, doloroso y difícil, pero que el cuerpo de la mujer está perfectamente preparado para sacar adelante (siempre y cuando lo esté).
En cuanto a la analogía con el hombre: si ese organismo tiene derechos como ser humano, y la implantación de ese organismo es voluntaria, por supuesto que le negaría el derecho al hombre.
Y yo no soy antiabortista. Soy dudoso como el que más y jamás condenaría a una mujer por abortar tres días antes del parto. Lo que no significa que quiera que se regule para permitirlo.
Pensándolo más, me doy cuenta de otro defecto en la analogía. No donar es una omisión; abortar es un acto. No donar es no hacer nada; si no haces nada, el embarazo continúa con normalidad. La analogía es forzadísima.
Puede estar preparada fisiológicamente, pero quizás no psicológica o económicamente. No somos únicamente la salud de nuestro cuerpo, sino asimismo nuestro estado anímico y nuestra posición social, nos guste aceptarlo o no.
¿Entiendo entonces que consideras que uno no tiene derecho siempre a decidir qué se hace con su cuerpo, y que otras personas pueden decidirlo?
Considero que uno no tiene derecho a hacer actos con su cuerpo que resulten en daño de otros (y eso no equivale a «otras personas pueden decidir», en absoluto). Considero que el ejemplo del donante no es válido porque equipara un acto con una omisión. Y considero que la consideración de «otro» que pueda tener un feto es digna de discusión.
En definitiva, considero que los argumentos expuestos no me valen y que estoy de nuevo en el punto de partida: la cita de Jesús Landart. Si necesitas una respuesta en una palabra: sí.
De modo que, si por ejemplo, una mujer es violada, el hecho de que ese feto ha sido concebido en una experiencia traumática para ella, que es no deseado de la peor manera posible y demás, es irrelevante. De modo que, además de la experiencia de la violación, la mujer ha de pasar además por embarazo y parto y, quizá también, criar al hijo de su violador.
O quizá el bebé sea anencefálico, con lo que el bebé no va a vivir más allá de unas horas o días, porque no tiene cerebro. O tiene tales deformidades que no podrá vivir nada ni parecido a una vida normal e independiente. Pero entonces tanto madre como hijo se ven obligados a arrastrar enormes padecimientos… ¿para qué?
A mi me parece una idea terrible, esta que propones.
Tu respuesta demuestra la increíble dificultad de tratar este tema fríamente y lo fácil que es dejarse llevar. Puesto que te has inventado mis conclusiones.
Yo hablaba *exclusivamente* de la analogía con la donación de órganos y con la implantación voluntaria en un hombre. Este segundo caso, implantación *voluntaria* (repasa mi comentario), deja claro que yo no he dicho absolutamente nada sobre el aborto de las violadas, que no condeno.
En cuanto a la analogía con la donación, dije algo de que el embarazo es un proceso difícil pero natural y sin peligros. La anencefalia no es un caso sin peligros. Así que no se deduce que condeno el aborto de anencefálicos. Y de hecho dije que volvía a la cita inicial, el criterio de la actividad cerebral… ¡justo lo que faltaría en ese caso!
Este es uno de esos temas donde la gravedad y la carga emocional nos lleva a entender equivocadamente lo que dice el interlocutor y encasillarle en un campo, en una ideología completa, a partir de tres frases inconexas.
Si quieres responderme a algo, respóndeme exclusivamente a mis dudas sobre la validez lógica de la analogía entre donación y aborto. Repito: no me vale porque equipara acto (abortar) y omisión (no donar), cuando todos los sistemas morales y legales del mundo diferencian las dos cosas.
En tal caso, me disculpo. Es evidente que, en efecto, te he interpretado mal.
Y me da la impresión de que ni te has fijado en la frase más importante de mis comentarios: «Soy dudoso como el que más y jamás condenaría a una mujer por abortar tres días antes del parto.»
Esto de repensar y no poder cambiar es un pifostio. 🙂
Mi postura, resumida:
-Reconozco el derecho ilimitado de las violadas a abortar. Mis palabras no permitían deducir lo contrario.
-Reconozco el derecho ilimitado al aborto en determinadas situaciones de peligro para la saludo. Mis palabras no permitían deducir lo contrario.
-Las analogías de la implantación en un hombre y la donación no me parecen válidas para demostrar que el derecho al aborto debería ser ilimitado en todos los casos. Les encuentro defectos lógicos.
-Al no encontrar válidos esos argumentos, no me muevo de mi punto de partida que es el mismo de la actividad cerebral y los tres meses citado al principio del artículo.
A mi los plazos impuestos por la ley me parecen razonables y acertados. Quizá podrían haber otros mejores, pero lo cierto es que no veo cómo.
El límite actual permite realizar las pruebas necesarias para detectar problemas que amenacen la vida de bebé y madre, y la verdad, si una mujer llega al 4º mes, es razonable suponer que no querrá abortar.
Puedo entender (y simpatizar) con las opiniones como la tuya, que se cuestionan qué derecho antecede a otro. Quizá este sea un punto en el que tengamos que limitarnos a discrepar. Yo estoy de acuerdo en que la actividad cerebral es un indicador posible, el problema es que, dado que en realidad el cerebro no acaba su maduración hasta los 20 años, cualquier línea que tracemos será arbitraria. Ojo, no es que eso sea malo.
Quizá debería añadir algo más clarificador, pero la gastroenteritis no perdona XD
> A mi los plazos impuestos por la ley me parecen razonables y acertados. Quizá podrían haber otros mejores, pero lo cierto es que no veo cómo.
Entonces no entiendo nada. Porque mi impresión era es que lo que se defendía era el derecho al aborto, sin plazos ni limitaciones.
No, pero me expreso pobremente y quizá esa sea la causa.
A mi la ley actual me parece adecuada porque en los casos extremos (violación, malformación y similares) respeta el derecho de la mujer a decidir, y es un plazo suficiente para que se pueda diagnosticar cualquier problema con certeza, y para que una mujer tome una decisión sobre si quiere o no. No pido más.
Bueno, yo parto de la base de no ser quien para decir a una mujer que es lo que tiene que hacer.
También tengo claro el aborto en el caso de violación o de malformación del feto o enfermedad que el impida llevar una vida normal. Es más, estoy a favor del aborto obligatorio (y/o esterilización) en los casos de la gente que, claramente por pobreza o drogadicción u otras situaciones por el estilo, no le va a dar una vida medianamente decente a su hijo [nota: en el programa de Ana Rosa Quintana salió una mujer cuyo marido se iba a quedar en paro y no tenían dinero para alimentar ¡a sus 6 hijos! Claro, la culpa la tenía el gobierno, no ella por decidir, en plena crisis, añadir tres churumbeles más a los que ya tenía, y así nos va] Pero claro, eso es de fascistas. ¡Cómo le vamos a impedir a una politoxicómana que pueda luego vender a su propio hijo por una papelina! ¡Qué sociedad somos!
Ahora bien, por la experiencia de haber conocido mujeres que en su momento abortaron y otras que decidieron tener a sus hijos saco una curiosa conclusión: todas las que lo tuvieron, incluso de adolescentes, no se lamentaban de haber tenido a sus hijos. Sin embargo, todas las mujeres que he conocido y que abortaron, en algún momento se lamentaron de haberlo hecho.
Creo que el debate aborto sí o aborto ha eclipsado la consecuencia de llevarlo a cabo.
A los antiabortistas, en el fondo, les importa una mierda el bebé porque no lo van a cuidar ellos, pero a los proabortistas les importa una mierda la madre, que en ese momento no piensa con claridad, pero que años después se cuestionará la decisión que tomó (he llegado a ver a una chica que no quería quedarse embarazada a pesar de querer formar una familia porque pensaba que era una traición al hijo del que abortó)
Y una cosa está clara, se tome la que decisión que se tome, una vez pasado el asunto (aborto o nacimiento) a los que andan discutiendo por el tema, les importará una mierda el destino del bebé si nace o de la madre si aborta.
No tengo palabras para expresar lo terrible que me parece tu comentario sobre esterilizar pobres o limitar el derecho de cualquier persona a tener hijos.
Más terrible me parece a mi tener hijos que van a revolcarse en la mierda, que no van a tener qué comer o que van a sufrir enfermendades indecibles solamente por no querer tener un mínimo de responsabilidad.
Pero más terrible aún me parece el cinismo de aquellos que hablan del derecho a la vida o de tener pero que jamás van a hacer nada por esos niños cuyas familias no pueden darles de comer.
Hay hogares de la Comunidad de Madrid lleno de niños abandonados con síndrome de Down, parálisis cerebrales, vih y otras enfermedades terribles. Y no he visto a nadie de los del derecho a la vida que vaya a adoparlos, o cuidarlos o visitarlos siquiera.
Es muy bonito manifestarse en contra de la adopción homosexual o el aborto pero no hacerse cargo de esos niños que han quedado solos por el mundo.
Estás hablando de esterilizar a la gente en función de su nivel de ingresos. O sea: castrar pobres. Si no eres capaz de ver qué está mal con eso, no creo que sobrevivas con los cojones intactos si alguna vez mandan los tuyos.
¿Y te has parado a pensar que igual esos «irresponsables» no tienen la información necesaria como para saber que pueden ir al médico y «solucionar» el problema? ¿O que no tienen ni idea de métodos anticonceptivos? ¿O que, simplemente, desearon intentar mejorar su vida y salir del pozo trayendo un niño al mundo, porque pensaron que les redimiría? Que manda cojones generalizar así.
Llevo días pensando si mandar mi comentario o no. Pero aquí estoy…Yo soy mujer y encontré esta página por casualidad. He sufrido 3 abortos involuntarios, ¿qué puedo pensar acerca de este tema?. Estoy de acuerdo con el aborto, para aquellas personas que así lo consideren necesario o simplemente porque no se vean capaces, o no quieran tener hijos, a fin de cuentas es elección de cada persona decidir algo tan importante como esto. Ahora bien, veo completamente injusto que haya gente que pueda tener esa capacidad de elección y para quién estamos buscando tener hijos se nos prepare un camino tan tortuoso como largo. Nadie puede imaginarse cuántas personas hay de diferentes edades en hospitales especializados en inseminación (yo soy una de esas personas), cuanto menos es triste y desolador. ¿Aborto o nacimiento?, por supuesto, yo decido nacimiento, aunque por supuesto también respeto aquellos que deciden abortar sean las razones que sean porque cada cual es muy libre de elegir, ahora bien, no pongamos excusas de que no siente o no padece o no es un ser que tiene derecho a la vida como cualquier otra persona, esa excusa que no se ponga, porque cuando escuchas por primera vez el laitdo de alguien que es tuyo o lo ves, el pensamiento desde luego es bastante diferente. Son seres con vida, y si hay razones para abortar, que se pongan otras que no sea ésta. No hay cosa más dura en este mundo que querer ser madre y no conseguirlo y tener que estar leyendo noticias continuas acerca del aborto voluntario, no es nada, nada justo, pero ¿quién define justicia e injusticia en este mundo?. Hay quien tiene la posibilidad de ser madre y no quiere (o no puede o no debe) y quien quiere serlo y simplemente tiene que luchar años para conseguir un sueño, para mí es totalmente injusto.
Lucía, en primer lugar: lamento muchísimo que hayas pasado por una experiencia tan penosa como la que describes. Espero que consigas tener un bebé y que todo os vaya genial.
Por desgracia, no creo que sea una cuestión de justicia. Hay personas que tienen más dificultades que otras para concebir, y eso no es justo ni injusto: es así. Lo que sí puede ser justo o injusto es qué medios ponemos para ayudar a quien quiere tener hijos y tiene dificultades. Y esto de acuerdo contigo: que la inseminación sea tan tan compleja es una desgracia.
Pero piensa que defender el derecho de una mujer a decidir si quiere o no continuar un embarazo no disminuye el tuyo a recibir ayuda para tener los bebés que quieres tener. No son cosas excluyentes, una no quita a la otra. Entiendo que para alguien que quiere ser madre leer a otra gente reclamando el derecho a no serlo puede ser doloroso, pero son derechos independientes.
Y por supuesto yo no digo que no sean derechos independientes, sólo digo que es muy, muy doloroso pasar por la situación que estamos pasando muchas personas, muchas parejas, para poder tener un sólo hijo y tener que leer o ver las cosas que veo y leo. Que una mujer pueda decidir sobre tener un hijo o no, lo apoyo, así como apoyo que cualquier mujer pueda decidir cualquier cosa en su vida, no sólo en este aspecto si no en todos los aspectos de su vida. La justicia o injusticia no la definimos nadie de nosotros, sólo está ahí: unas personas tienen potestad de decidir si no quiere tener un hijo y otras no podemos tenerlo sin pasar por un proceso que es tremendamente largo y muchas de nosotras ni si quiera lo conseguimos. Son temas completamente diferentes, y eso lo sé. Al igual que (y antes no lo he comentado) el derecho que también tiene un hombre de poder querer se padre y que una mujer decida abortar porque es su cuerpo, supongo (y sólo supongo) que ese feto no ha venido por sí mismo y muchos hombres quieren ser padres y en cambio no son ellos los que se comen las calles y los congresos para poder ejercer ese derecho. El tema del aborto es complicado porque hay muchas personas, con diferentes situaciones y la realidad de la situación es que no debería ser sólo la mujer quien decidiera eso sólo por ser su cuerpo. Cuidado que yo soy mujer pero ante todo y sobre todo soy persona y derechos los tenemos todos, vosotros como hombres y nosotras como mujeres. Me parece bien que cada cual decida su vida, pero SU vida no la del resto de gente. Supongo que hay muchos hombres que también tienen mucho que decir sobre este tema, y a muchos, desde luego no les importaría ser padres solteros si su mujer o su pareja no quiere ese bebe. Si hablamos de derechos, hablemos de todos los derechos en general que todas las personas tenemos.
Buenas otra vez.
Lo primero, siento mucho lo tuyo Lucía. Espero que algún día puedas ser madre y que todo lo que estés pasando al final merezca la pena, que seguro así será.
Lo segundo y por alusiones. No entiendo nada por que Imperator habla de los «míos». ¿Te refieres a los nazis por el tema de la esterilización? ¿Y que crees que pensarán de ti ciertos sectores con tus comentarios a favor del aborto? ¿Acaso te he dicho yo que eres un asesino por pensar así?
Por lo que veo, hasta el pensamiento de quien creía más cultivado y racional, por lo que he leído en este blog, termina en caca, culo, pedo, pis, faxa y nazi. Viva el pensamiento de rebaño.
Pero claro, ¿y por qué me voy a sorprender? Si después del alegato de que todos tienen derecho a ser padres (con rasgado de vestiduras incluido) defendemos el derecho a matar al feto cuando me salga de ahí y nos quedamos tan a gusto, pedir coherencia es un ejercicio inútil. Es más, me dejas sin palabras.
Pues no, si defendemos el derecho a ser padre hay que ser coherente y defender la responsabilidad de serlo. Nada de medias tintas, nada de es que ahora no puedo, es que no estoy preparada, es que la sociedad… esto no es una compra de unos pantalones que no me están bien, estamos hablando de hijos. Si quieres tener hijos, ten la responsabilidad de hacer que no sufran. Dudo mucho que tú hayas tenido a tu hija a lo loco, sin pensar en lo que le puedes dar y lo que le va a faltar. Dudo mucho que, si no tuvieras para comer, decidieras tener hijos que se mueran de hambre contigo.
Y no vale decir que es que no se tiene información o medios. Hasta en el Tercer Mundo se sabe que si follas, lo más probable es que tengas hijos. Y también se sabe que si no tienes para comer tú, tampoco lo tendrá tu hijo. Ya no te digo en el primer mundo, donde toda información está a un click de ratón.
No señor, de lo que aquí se habla es de responsabilidad, de tus propios actos y, sobre todo, responsabilidad hacia los más débiles.
Una vez alguien me dijo: «si tienes cojones de salir de fiesta hasta la mañana siguiente, tienes que tener los mismos cojones para levantarte y realizar las tareas que te correspondan». Pues eso se aplica a todo, incluidos el sexo, los embarazos y los hijos.
Y si hay gente totalmente irresponsable que trae hijos al mundo para que se mueran de hambre, para maltratarlos, para que nazcan con sida o parálisis cerebral o para simplemente venderlos por un móvil o tirarlos a la basura… entonces la Sociedad debería perfectamente evitar esa situación antes de que se produzca el problema.
Ahora bien, igual es más humano no evitar el problema para luego hacernos unas risas con hemorragias, fetos en formol o en el water y problemas psicológicos varios.
¿Sabes? a mí me da igual realmente que te deje sin habla mi pensamiento, pero me gustaría mucho que un día fuerais a un centro de acogida y le explicarais a un niño con parálisis cerebral o vih lo del derecho de su madre politoxicómana a ser madre. O a un niño que rebusca en la basura hacerle comprender que está así porque era muy necesario redimir a sus padres. Que igual ya no piensas que «los míos» me vayan a cortar los cojones.
Pero por eso no te preocupes, que si yo no tuviera para dar de comer a un hijo, o mi genética le perjudicara, ya me encargaría yo de atarme los machos para no engendrar sin necesidad de que mi pareja tuviera que pasar por un aborto.
Pues ya que me he metido conscientemente en este fregado, me meto hasta el final, así que voy a contestar, por interés (Lucía) y por alusiones (Danniel):
Lucía: Siento muchísimo lo que te está pasando, y como mujer que, de querer quedarme embarazada lo iba a llevar chungo, te entiendo perfectamente. La frustración y hasta el dolor de hablar del tema. En lo único en lo que no estoy de acuerdo es en lo de que los padres deban poder decidir también. No es su cuerpo, ni ellos van a pasar los 9 meses de embarazo ni el parto. Ni van a correr el riesgo de que les echen a la calle por estar embarazados. Así que, mientras eso no cambie (y la cuestión biológica no va a cambiar), no creo que tengan ningún derecho a decir nada. Ni a favor ni en contra del aborto, más allá de apoyar a la mujer, tome la decisión que tome. Sinceramente, si tanto quieren ser padres solteros, que adopten, que hay muchos niños que lo necesitan.
Danniel: No pensaba entrar en lo de la esterilización, pero ya que insistes, entremos. Porque es muy fácil decir que los que estamos en contra acabamos recurriendo al “caca, culo, pedo, pis, faxa y nazi”, pero lo cierto es que a tus palabras y los hechos hay que remitirse, simplemente. Ya hubo quien abogó por la esterilización de los “no válidos”, y mal que te pese, fueron los nazis. Sólo por eso tu argumento queda, para mí, invalidado desde el segundo 1.
Siguiendo con tus palabras, “defendemos el derecho a matar al feto cuando me salga de ahí y nos quedamos tan a gusto”. Creo que la diferencia es que tú consideras al feto un ser humano desde la concepción y yo no. A la madre sí, al feto, pues no. Un grupo de células son eso, células. Y poner sus “derechos” por encima de los de un ser humano me parece absurdo.
“Hasta en el Tercer Mundo se sabe que si follas, lo más probable es que tengas hijos”. Claro que sí, hombre. Por eso cada año se hacen miles de campañas de educación sexual. Claro. Porque ya lo saben y saben que si usan condón la probabilidad de que no pase es del 98%, claro.
“Ya no te digo en el primer mundo, donde toda información está a un click de ratón”. Serás tú. Porque en zonas rurales no todo el mundo tiene Internet. Y hablo de España. Mejor no hablamos de lugares como China, donde el acceso a Internet está censurado. O en Rusia, donde está habiendo una involución respecto a las libertades sexuales de los individuos.
“Ahora bien, igual es más humano no evitar el problema para luego hacernos unas risas con hemorragias, fetos en formol o en el water y problemas psicológicos varios”. Exactamente, ¿quién en este debate ha hecho eso?
“Me gustaría mucho que un día fuerais a un centro de acogida y le explicarais a un niño con parálisis cerebral o vih lo del derecho de su madre politoxicómana a ser madre”. Pues mira, tengo un hermano adoptado que nació en la cárcel. Esta parte ya la he hecho, gracias. Y sigo en mis trece.
“Si yo no tuviera para dar de comer a un hijo, o mi genética le perjudicara, ya me encargaría yo de atarme los machos para no engendrar sin necesidad de que mi pareja tuviera que pasar por un aborto”. Igual si no tienes para comer tampoco tienes para condones. O para un aborto, que de momento es gratis. De momento.
Tindriel, una pregunta, a lo que has dicho a Danniel de «Creo que la diferencia es que tú consideras al feto un ser humano desde la concepción y yo no», entonces, dime una cosa, si no es un ser humano, ¿es una planta?, quizás ¿es un jabalí?. Eso me recuerda mucho lo que dijo Aido, lo que yo llamaba «bebé Aido», «que ni es humano ni está vivo» .Y por alusiones, te respondo, a lo que dices, que a ellos no les echarán del trabajo, la ley desde luego tiene que cambiar muchas cosas entre ellas por supuesto la de echar a una mujer de su puesto de trabajo por estar embarazada (a mí me ha pasado). Si la ley está mal hecha o no existen leyes que salvaguarden eso es una cosa bastante diferente a «yo aborto porque es mi cuerpo y hago lo que yo quiero», porque para mí (cuidado que digo «para mí») hay más de uno al que hay que preguntar, primero a la pareja y después por supuesto a esa personita (que muy diferente a tí pienso que es un ser humano, no desde el momento que se concibe pero sí después, y no por eso hay que excluirlo). Repito, soy mujer, y hago lo que quiero con mi cuerpo, pero siempre respetando las demás opiniones y sobre todo y mucho más a aquellas que me competen.
Imperator, se me olvidó decirte que tienes una niña realmente preciosa. 🙂
Lucía, gracias por lo de la cría 🙂
La ley actual del aborto (antes de que la deroguen los peperos) es una ley que defiende el derecho de la mujer a decidir dentro de las 24 primeras semanas de gestación. No es una ley que te limite a ti el derecho a intentar tener hijos, ni la asistencia si no puedes tenerlos.
O lo que es lo mismo: estás jodiendo la libertad de otras mujeres a cambio de que la tuya se quede igual.
Además, a la pareja hay que preguntarle, pero eso no creo que deba ser vinculante a nivel legal. A mi me gustaría que mi mujer contara conmigo para una decisión así, pero yo no soy nadie para decidir sobre su cuerpo. No es mío. No tengo derecho.
Y a la personita no se le puede preguntar nada, porque la personita, hasta pasadas muchas semanas, no es diferente de un tumor u cualquier otro crecimiento celular. Y cuando pasa a ser feto y ya es una protopersona, pasa a ser algo a lo que tampoco le puedes preguntar. En serio, la idea es absurda.
Imperator, el que un padre pueda decidir o no decidir, decir que el feto tiene derecho a la vida, o que es la mujer quien decide porque es su cuerpo y sólo a ella le compete eso, son opiniones, tú puedes opinar A y otra persona B, son sólo puntos de vista.
Ahora bien, te digo lo que pienso acerca de las 24 semanas de gestación. Pienso que si una mujer quiere abortar, eso lo sabe antes de transcurrir esas semanas y cuanto antes sea, es mejor sobre todo para ella. De otra cosa no sabré pero de abortos por desgracia sé bastante y sé que es un proceso duro, así que supongo que quien lo hace porque tiene x razones para hacerlo será duro de la misma manera hormonalmente hablando. Yo nací con 28 semanas de gestación, y tengo un amigo que por problemas que tuvo su madre en el transcurso de la gestación nació a las 20 semanas y está vivo y perfectamente. Lo que trato de decir es que se puede abortar pero que el tiempo de hacerlo sean 24 semanas me parece excesivo puesto que (repito) si una mujer tiene razones para hacerlo (las suyas propias, en eso no me meto) creo que el tiempo de pensarlo y decidir tal cosa debería ser antes de esas 24 semanas porque está probado que un feto puede vivir perfectamente naciendo a las 20 semanas y eso se llamaría asesinato desde mi punto de vista. El problema no es abortar o no, quitar el derecho al aborto o no, el problema es que nos vamos a extremos: o no se aborta aunque el feto venga mal a pesar de que vivir en esta sociedad con deficiencias es bastante complicado (lo sé bastante bien porque tengo un hermano adoptado con sindrome de Down) o abortar hasta las 24 semanas, algo que sin duda alguna me parece horroroso. Desde luego yo no apoyo ni una cosa ni la otra, porque ambas me parece llegar a extremos que ni si quiera debieran ser pensables o imaginables.
Lucía:
Estamos de acuerdo en que la mayoría de veces, el plazo es más que suficiente. Yo lo encuentro adecuado porque puede ser que quieras tener un bebé, pero no se detecten ciertas malformaciones graves hasta ese momento, debido a la naturaleza de las pruebas. Por supuesto, si la interrupción del embarazo es debida a que la chica nunca quiso quedarse embarazada, lo va a tener claro antes. Sin embargo, el plazo permite diagnosticar complicaciones en el feto que le pueden llevar a tener una vida horrenda, o una esperanza de vida limitada.
Si las pruebas permitieran la detección más pronto, los plazos podrían ser más cortos, pero esto es una mera cuestión de tecnología, y nadie tiene la culpa de que los plazos por ahora sean estos. Cada vez será más fácil, claro.
Entiendo tus objeciones morales, y estoy seguro de que los plazos se podrán reducir conforme las pruebas diagnósticas mejoren.
Y estoy completamente de acuerdo contigo en esto que dices, por supuestísimo. Pero yo hablaba de la posibilidad de abortar en ese tiempo (24 semanas) sin haber anomalías ni nada que extralimite la vida de un feto sin necesidad. Efectivamente para el caso que tú comentas, está clarísimo que nadie querría una vida tan limitada para su hijo. Supongo que si existe la posiblidad de abortar con 24 semanas, no todos los casos lo harán por anomalías en el feto. Como siempre digo y mantengo, las situaciones de cada persona, y cada persona en sí es diferente. Verdaderamente creo que debería estudiarse cada caso y desde luego si es por anomalías está más que justificado. Por eso mismo no estoy de acuerdo con lo que quiere hacer el PP de aquí todo el mundo a tener hijos y que ni «quisqui» tenga la posibilidad de abortar. Tampoco es eso. Pero repito (y me repito mucho) deberían estudiar cada caso y que esas 24 semanas límite sean en casos en los que el feto cuando nazca su vida sea limitada o cualquier otro problema que sea justificable, pero en el resto, creo que con un plazo de 12 semanas es más que suficiente.
No tengo estadísticas, sólo opiniones y experiencias de personas que trabajan en sanidad, pero cuando el aborto es simplemente porque el embarazo no es deseado (por violación o porque se detecta que los anticonceptivos han fallado) nunca se llega ni cerca de ese plazo, sino que se lleva a cabo tan pronto como es posible, antes de las 12 semanas en la mayoría de casos.