Encontrado aquí, en una entrevista al excelente Ramit Sethi, un tipo que se dedica a ayudar a la gente con sus finanzas personales:
Pregunta: ¿Es realista tratar de encontrar tiempo para ganar dinero extra? Mucha gente ya está bastante justa de tiempo ahora mismo.
Ramit Sethi: Dame un respiro. De acuerdo con la encuesta de Nielsen, los estadounidenses vieron la TV una media de 34 horas por semana en 2010. Pasamos tiempo en Facebook y jugando a Farmville — y eso está bien, pero no me des la excusa del «tiempo.»
Si es importante, puedes encontrar 5 horas a la semana para ganar un dinero extra.
No tengo tiempo de ir al gimnasio.
No tengo tiempo de hacer un curso para algo que me gusta / ayudará a encontrar un trabajo mejor.
No tengo tiempo de aprender un idioma nuevo.
No tengo tiempo de ordenar el despacho.
Es por esta razón por la que, en terapia, los registros de lo que haces son tan importantes. Es facilísimo perder de vista en qué invertimos el tiempo realmente. Hasta que empezamos a anotarlo, a registrarlo de algún modo.
¿Quieres dejar de fumar o bajar el consumo de tabaco? Anota cada cigarro que fumas, dónde y a qué hora. En promedio, el consumo de tabaco baja un 70% y los intentos de dejarlo tienen más del doble de éxito.
¿Quieres seguir una dieta? Coge la cámara del móvil y fotografía cada cosa que comes antes de morder. Luego ponla en un sitio donde puedas verlo, ver lo que comes cada día. Pon tu puño al lado para tener una idea de la escala. Perderás 3 veces más peso.
Como decía Lazarus Long en Tiempo para amar (que estoy revisitando esta semana):
Si no puede expresarse con números no es ciencia: es una opinión.
No te fíes de tu memoria ni de tus impresiones: mienten y distorsionan. Ante la duda, registra y mide. Los resultados vienen así.
Ostras, qué buena idea lo de fotografiar la comida. A veces hacer un registro escrito es complicado (¿Cuántos gramos/raciones/whatever tiene este plato? ¿Dónde he dejado el cuaderno donde tomo las notas?) y lo de la foto lo soluciona.
Gran idea, sí señor. El resto del post también, pero es que esto me ha llegado, tío… 😛
Es que todos tenemos una cámara a mano todo el tiempo. Y es muy fácil. Cada día fotografías todo lo que te comes y bebes (los refrescos azucarados engordan un millón): TODO. Y al final del día, o al inicio del siguiente, lo subes a un blog, Flickr, lo que sea. Esto tiene dos efectos:
Primero, es muy probable que al sacar la cámara y fotografiar la comida, pienses en el tamaño de la ración y en si es o no una comida adecuada para no engordar. Sobre todo si usas el puño como referencia visual.
Segundo: como probablemente tus raciones irán disminuyendo en cantidad (porque comerás menos) y mejorando en calidad (evitarás comer porquerías), estarás más motivado a seguir porque verás progreso.
Es lo mismo que pasa con hacer pesas, y casi nadie se da cuenta.
Otro uso particularmente bueno de este principio son las fotos de antes y después, actualizadas cada semana.
Algún cachondo habrá que, además, lo cuelgue en facebook. 🙂
Pero lo del tiempo y el seguimiento inmediato y tangible (nadie se acuerda al final del día de qué comió realmente) son dos ideas muy buenas.
» Sin números no es ciencia es opinión» ^^
Me ha gustado mucho, sí señor, las más de las veces en nombre de mi «buena memoria» recuerdo lo que me da la gana 😀 y claro así los propósitos se quedan en eso.
Yo suelo registrar lo que hago a lo largo del día. Si algún día dedico más tiempo a alguna tarea, jamás pienso que es que «no tengo tiempo».
+1
Me gusta cómo lo has expuesto. Por cierto, había pensado lo de las fotos semanales para el gimnasio, en previsión de los momentos de baja motivación, pero no lo había hecho. Ahora, como me lo has recordado, lo he metido en mi lista de tareas y lo haré.
Gracias.