Y fin de la serie. Visto hasta ahora:
- No cambiamos hasta que no tenemos un por qué de verdad para ello, aunque sepamos cómo hacerlo.
- A menudo nos ponemos a obsesionarmos con la dimensión global de lo que queremos conseguir, en vez de centrarnos sólamente en el siguiente paso a dar, y convertirlo en un hábito.
- En nuestras relaciones, fracasamos porque mentimos sobre lo que queremos de verdad para parecer menos egoístas, y no pedimos ayuda cuando la necesitamos.
- Encima, nos creemos que podemos cambiar y añadir nuevas conductas sin tener en cuenta el coste porque cada aspecto de nuestra identidad consume tiempo, y es un juego de suma cero. Para ser mejor en A, tengo que dejar de dedicar tiempo a B, y si no lo tengo claro, lo voy a echar mucho de menos.
- Nos mentimos a nosotros mismos acerca de lo que queremos, confundiendo las verdaderas intenciones que tenemos con cosas que nos molaría que pasaran pero que pensamos que no somos responsables de lograr.
- Como nos mentimos mucho, lo que hacemos y lo que pensamos que es importante hacer son conjuntos disjuntos. O lo que es lo mismo, las cosas que nos decimos que son importantes no suelen recibir tiempo ni atención, pero nos mentimos tan bien que ni nos damos cuenta.
- Pensamos que la felicidad es para gente estúpida, lo cuál hace que no nos molestemos en aprender recursos para ser más felices porque total, la ignorancia es mejor. Y por otro lado, a menudo dejamos que pensar en las cosas sustituya a hacer cosas, que es lo que realmente nos puede ayudar en mejorar nuestra vida y ser felices.
- Dejamos que las pequeñas contrariedades nos amarguen más que las grandes tragedias, en vez de solventarlas.
- Las relaciones nos hacen daño pero no podemos subsistir sin ellas. Además, no nos damos cuenta de que los demás nos tratan del modo que les enseñamos a que nos traten, y que por el otro lado, la mayoría de veces las cosas que nos joden de los demás las provocamos nosotros.
Todos estos fenómenos nos joden la vida, pero bien. Están detrás de nuestros fracasos a la hora de hacer lo que creemos que queremos hacer, de mejorar y cambiar nuestras vidas, de relacionarnos con los demás. Y todas estas cosas se deben a sesgos de los que ya hemos hablado muchas veces, y otros de los que hemos hablado por primera vez,
O sea, que nos jodemos la vida por cosas preconfiguradas en nuestro cerebro, formas innatas de conducirnos que demuestran que la racionalidad que damos por sentada no es tal, y que en realidad no podemos fiarnos mucho de nuestras percepciones, de nuestros pensamientos y acciones.
Pues vaya mierda, ¿no?
Hay soluciones para esto, claro, la psicología no ha estado ociosa durante el último siglo, sobre todo una vez que nos sacudimos la peste del psicoanálisis de encima. Y aunque aún no tenemos todas las respuestas, si hay unas cuantas cosas que hemos comprobado que ayudan a evitar estas cosas, a hacerlas menos probables.
Las posibilidades se reducen a tres campos en los que trabajar, en realidad: cómo afrontamos las situaciones, cómo nos relacionamos con los demás y cómo planeamos y ponemos en marcha los cambios en nuestra vida. En estas tres cosas se puede trabajar, y hay métodos que funcionan.
¿La mala noticia? Que ninguno de estos métodos es fácil, seguro ni indoloro. Muchos de ellos son laboriosos, tediosos o dolorosos. En muchos casos tendrás que hacer elecciones feas, o mirar cosas poco agradables de ti mismo o de otros, y tendrás que hacer cosas que puede que no agraden a gente a tu alrededor. Pero funciona. Vaya si funciona.
De modo que, queridos lectores que habéis llegado a amenazarme para que siga con la serie, o que me habéis exigido vuestra mandanga diaria (Alberto, te miro a ti), os dejo que elijáis (y de paso pruebo la cosa esta de insertar encuestas). ¿Por dónde empiezo a escribir? ¿Qué atacamos primero?
Dejaré la encuesta unos pocos días y en función de lo que salga empezaré por un tema o por otro. Elegid sólo uno, aunque no es muy importante porque los acabaremos tocando todos.
[googleapps domain=»docs» dir=»forms/d/1gz9iwoNmZKP9x2TeIqbY1EAT1taFjcjfyJLELvB8418/viewform» query=»embedded=true» width=»760″ height=»500″ /]
Este… Hay votos de calidad? Parece que lo que yo he votado va perdiendo 🙂
No, me temo que no. Pero no hay problema. Tocaré todos los temas, es cosa de orden.